sábado, 31 de enero de 2009

GRANDE JULITO


Desde Buenos Aires me informan que la factura de la luz me llegó con un aumento del 550% . Pensé que se habían equivocado. Me comuniqué por e-mail con algunos de mis amigos y a todos, con algunas diferencias en los porcentajes, les había pasado lo mismo. Leyendo Clarín y La Nación por internet me enteré que Eduardo Mondino el Defensor del Pueblo, había presentado un recurso de amparo para que, a los que no pagamos lo exigido, no nos corten el suministro eléctrico. El Ministro de Planificación Julio De Vido aumentó la apuesta y contraatacó. Pidió que se haga justicia con los osados y atrevidos. 
Te debió haber pasado, me explicó un experto en estos temas, que consumiste más luz que en el mismo bimestre del año pasado y entonces además del aumento te multaron. Me pregunté si estaba loco. No tenía sentido que hubiese llamado a mi psiquiatra. Después de tantos años, tenía que entender lo que estaba pasando sin su auxilio mental. Recordé haber leído un pedido de nuestra Presidenta: "...hay que consumir". Me habían convencido que a nosotros la crisis mundial no nos iba a afectar. Por suerte no era un afiliado a las AFJP. Estoy en Albuquerque, New México en U.S.A. Al sur del estado de Colorado y al oeste de Texas. A 500 km. de la frontera. Le pregunté a mi yerno Germán, futuro doctor en economía ¿que pasaría en este país si no abonás la factura de la luz? ¿La cortan?. Silencio. ¿Y si te viene con un aumento de casi cinco veces?. Silencio. Hace 14 años que se fue de La Argentina. No entiende de que estoy hablando. Si abre la boca seguro que me aconseja que revise mi añejo tratamiento y que me vendría bien una internación, en lo posible, prolongada.

Comienza un nuevo torneo de fútbol. No sé cuales habrán sido los motivos que lo llevó a Don Julio pensar en modificar los campeonatos. La cambios que hizo de largos a cortos fue,según mi opinión, un acierto. Casi todos fueron apasionantes. Para los de arriba y los de abajo. Las ligas europeas son largas. Además de consagrarse en el torneo, los clubes le dan una gran importancia a las copas internacionales. Tienen mayor jerarquía que las nuestras. Son continentes distintos, con mayores posibilidades económicas y financieras. Más serios en la organización y en la competencia. Un técnico puede ganar el campeoanto, pero sin una UEFA Champions Luage en su haber, tarde o temprano se tendrá que ir. Los contratos no son por una temporada donde está  en juego solamente el torneo local . Incluyen también las distintas copas internacionales. Si no clasifican: Good bye.
Nunca ví una champions, y eso que presencié los últimos ocho campeonatos mundiales. Me gustaría estar este año en la final que se jugará en Roma.

Los precios para ver los partidos de fútbol han aumentado de manera notable. Habrá un mayor ingreso para los clubes. Saldrán entre  24 y 30 pesos y a las instituciones les  quedará menos de la mitad. Los que no sufrirán descuentos en la recaudación serán las barras bravas ya que están excentos de gastos e impuestos.
    
Hay 5 horas menos que en la mayoría de las ciudades de nuestro país. Ayer ví por un canal de televisión que aquí también cortan la luz. Quienes la generan son empresas privadas. Los motivos son diferentes. En distintas ciudades, por el cableado aéreo, las heladas y la nieve, los congela.

Un amigo latino, que vive en Washington y trabaja en la Casa Blanca, me confió que el Presidente Obama, enterado de lo que ocurre en La Argentina quiere tener como asesor en su gabinete al gran De Vido.
¡Vamos Julito todavía!

jueves, 29 de enero de 2009

GALLARDO: TELEFONO


Nací en el barrio de Roberto Arlt. Aguirre entre Serrano y Thames. En la década del 60 ya era un pibe privilegiado. ¡Tenía teléfono! Años más tarde, ya casado y con mi primera hija, viví en Malabia y Corrientes. El departamento era de dos ambientes. Estaba desocupado. Lo había heredado de mi padre. Por aquel entonces no se podía desalojar a los inquilinos. Los gastos de mantenimiento de los propietarios eran mayores a los ingresos. Continuaban las experiencias demagógicas. Lo populista sumaba. Ya ejercía mi profesión. Empezaban mis ausencias por las transmisiones deportivas y los viajes. Luciana ya había nacido. Necesitaba estar comunicado con mi familia. No existían los celulares y por supuesto dejé de ser un privilegiado. No tenía teléfono. Fuí hasta Cabildo 4. La sede de Entel. Pensé que se sacaban entradas para ver a River-Boca. Un flaco se apiadó de mi ingenuidad cuando le dije que venía a pedir una linea... "Andá al bar que está sobre la Av. Corrientes entre Gurruchaga y Acevedo. Allí en la mesa junto a la ventana están los muchachos que te van a dar una mano". 

¿Que necesitás, pibe? Luego de una pequeña explicación sobre mi necesidad, me respondió: son 10 lucas verdes (diez mil dólares). Casi me suicido. Por aquel entonces, era lo que valía mi departamento. Mi único capital. Si no los tenés podemos conseguir uno compartido con algún vecino. Les ponemos un timbre y una llave especial para pasar los llamados. Eso te va a costar la mitad. Por supuesto seguí como estaba y empecé a vivir como la mayoría de los argentinos.
Los avisos clasificados de aquella época decían: "Vendo departamento con teléfono".

Años más tarde, en un programa radial que iba a las cinco de la tarde y se llamaba como éste blog, se lo conté a Fernando Pacini. Ya se había privatizado Entel. Se convirtió en Telefónica y Telecom. Desde su juventud no salía del asombro y por supuesto no me creyó.
Días después y con la confirmación de sus padres, se dió cuenta que mi historia era cierta.

Hace un par de días Pacini me mandó un e-mail donde me adjuntó una nota que iba a publicar sobre el deseo de los dirigentes de River de adquirir a Marcelo Gallardo. En ella describe las actuaciones del "muñeco" en los últimos tiempos. Fernando dice en su nota. "Gallardo, con 33 años, viene de jugar en el DC United de los Estados Unidos. Participó solamente en 15 partidos durante 2008. Completó los 90 minutos en sólo 7 de esos juegos, en una Liga menor como la estadounidense. Marcó 4 goles. El año anterior estuvo en el Paris Sain Germain: 8 partidos de titular y 14 de suplente. Dos goles en el año. Llega recuperándose de una lesión y, con suerte, River dispondrá de sus servicios recién en marzo. Digamos, no son las condiciones ideales para contratar un jugador que pueda cambiar el panorama. Más allá de las virtudes de líder que efectivamente tiene Gallardo, sus facultades futbolísticas no están a la altura de sus mejores días. Con él, River se asegurará un líder, pero toma grandes riesgos futbolísticos". Así, entre otros conceptos, opinaba Pacini. Pienso lo mismo.

¿Dónde están los enganches? Así denominan la mayoría de los directores técnicos a los conductores de los equipos. Es una raza en extinción. Por eso cambian las tácticas y cuando aparece uno o ven a alguna reliquia que todavía queda, pagan lo que pagan. Me refiero a las Ligas europeas.

Tengo teléfono. También celular. En La Argentina te cobran hasta el agua de los floreros, ahora de los fideos, lo digo por el precio. Ya ni románticos podemos ser. Aquí podés llamar a todo el país y no hay recargo por larga distancia. Los fines de semana el servicio es gratuito. Y si hablás con alguien que tiene tu misma compañia también. Lo mismo ocurre después de las nueve de la noche llamando al celular de cualquier empresa.

No se te ocurra, después de lo que te conté, llamar para protestar. Acordate que estás en nuestro país al que volveré con mucho gusto y con mucha bronca.

lunes, 26 de enero de 2009

MENTIROSOS


Mis hijas, Luciana y Florencia, saben que su padre nunca les mintió. Fueron muchas las discusiones que he tenido que soportar. Que son chicas, no están preparadas, el daño será irreparable, las vas a traumar con las cosas que le decís. Casi todos hemos crecido en la mentira. La de nuestros padres. Nuestros maestros. Nuestros políticos. Nuestros gobernantes...En el mundo en el que me desenvuelvo la gente no puede responder ante una pregunta cuya respuesta ignoran: no sé. La mayoría de las veces la inventan . Eso también es mentir. Habré cometido muchos errores como padre pero estoy seguro que mis hijas saben que he contribuido a su salud mental, por lo menos en este aspecto. Me creen. No desconfian de los que les digo, respondo o cuento.

En mi profesión he encontrado muchos mentirosos. Periodistas, jugadores, directores técnicos, dirigentes. Recuerdo cuando relataba en TyC había un alto grado de comunicación y afecto con Tití Fernandez. Un gordito mentiroso. No en cosas profundas. Quizás en nimiedades. Le encantaba responder a todo. No soportaba el no poder contestar. ¡Cuántas veces nos reíamos con Macaya y Benedetto! "Típico de argentino, lo que no sabe lo inventa". Esa era mi reflexión pública ante algunas de sus afirmaciones.

Carlos Babington se había ido a jugar a Alemania. Me contaba que una de las cosas que más lo había sorprendido, además de la clásica frialdad de los germanos, era que no existía lo que habitualmente se manejaba en nuestro fútbol: el secreto del vestuario. Contaban lo que ocurría con absoluta normalidad. Cuando lo charlo con algún técnico, jugador amigo o conocido y le pregunto cuál es el motivo de no poder decir la verdad de lo que está ocurriendo sobre un hecho determinado, la respuesta es siempre la misma: "Sos loco como lo vamos a contar". Un director técnico muy éxitoso a nivel local no pudo soportar que se filtrara un problema que habían tenido algunos de sus jugadores. Se enteró que en aquel entonces uno de sus defensores había sido el "delator". Fue como si le hubiesen clavado un puñal por la espalda. Sufrió con la verdad más que Julio César, pero sigue vivo. La reunión que mantuvo con el grupo fue durísima. Lo que más te importa en este momento es conocer quien fue el técnico, el club que dirigía y el jugador... Lamentablemente no lo te puedo decir, pero ya sabés que no miento. La verdad no debía conocerla el periodismo, ni los socios o hinchas de esa institución. Hay otro ejemplo actual para dar entre los que rodean en este momento al fútbol. La del arquero Caranta. Muchos periodistas manejan distintas variantes por los motivos que desembocaron en su separación. Los que tienen que informar, dirigentes, director técnico, manager o el propio jugador, que ahora empezó a hablar, callan la verdad de lo ocurrido. Si alguien dice o escribe algo se irritan y rápidamente salen a decir que mis colegas inventaron la información y que exageran con lo que dijeron o escribieron. ¿Se imaginan lo que puede llegar a suceder si alguien se anima a publicar alguno de los rumores que giran en derredor de este caso? 
¿Quién puede creerle a la mayoría de los dirigentes cuando dicen en cuántos millones de dólares vendieron o compraron a un jugador? ¿Se dieron cuenta que aunque lo hayan vendido a Europa o a un empresario el euro no existe? La diferencia es mínima. Tan sólo un 30 %. Sería estupendo que se crucen las informaciones entre los controles fiscales de ambos paises para que nos enteremos de cuánto dinero se pagó desde el exterior por una compra y cuánto figura en el club de nuestro país por la venta. Algún recibo de alguna sociedad fantasma siempre existirá para justificar la diferencia. 

Podríamos recopilar todos los discursos previos a una elección nacional o provincial para volver escuchar o leer las mentiras de nuestros políticos. Lo dramático es que los vuelven a votar. No hay ningún castigo para sus falsas promesas. Por ahora hay algunos pesitos mensuales con atrasos por la situación económica y financiera del planeta tierra. Volverán antes de octubre, por supuesto, las heladeras, colchones, bicicletas, acompañadas por choripanes en las reuniones sociales de alguna marcha por reivindicaciones y necesidades incumplidas que nunca verán ni ellos, ni sus hijos, ni sus nietos, ni sus bisnietos.

No quiero utilizar mis casi cuarenta años de terapia para interpretar la mentira. Como en otros órdenes de la vida, no pasa nada. No es una cuestión de ideología o de partido político. Casi todos nos mintieron. Ellos felices de haber podido llegar al poder con ese discurso. Es una metodología. Me duele, me lastima y me fastidia que me o nos tomen por boludos. Ni que hablar de los militares y sus ministros civiles. En la democracia algunos pequeños ejemplos como títulos. Alfonsín: felices pascuas. Menem: no los voy a defraudar. De la Rúa: todo seguirá igual con el uno a uno. Los que vinieron después sin que los hayamos votado ni que hablar. Duhalde, un manto de piedad. La familia Kirchner: estamos en el infierno. Y seguimos en él. Me olvidé de poner en la bolsa a bastantes gobernadores, senadores, diputados, concejales, intendentes, ministros, secretarios... Alguien que no recuerdo en este momento dijo: "De vez en cuando dí la verdad para que te crean cuando mientes". 

Queridas Luciana y Florencia. Acabo de recordar que les mentí. Cuando tenían que dejar el chupete se los saqué y les dije que se lo tenía que llevar un trencito. Les pido perdón.

viernes, 23 de enero de 2009

CRISTINA: VISITALO A BILARDO

Mi hermano y amigo Fernando Niembro trabajaba como periodista deportivo en un programa al mediodía en canal nueve que conducía Sofovich. Super profesionales los dos. Gerardo lo volvía loco. Quería siempre que vaya al canal un invitado que fuera la noticia del día. En vivo. Nada de camión de exteriores o grabaciones. Fer vivía con más presión que Lassie con Rin Tin Tin. Llevó a Pastoriza el día que lo liberaron por un tema que tenía que ver con un supuesto robo de nafta. Siempre esperaba con desesperación a sus probables reporteados en la puesta de la calle Gelly. A medida que el programa, que salía en el canal de Romay, subía en el rating los invitados aceptaban con mayor agrado participar. Un mediodía llevó a Carlos Bilardo. Contó, como lo hace el doctor, un montón de anécdotas y además su manera de manejar el grupo de jugadores, la importancia de la táctica, la estrategia, el cumplimiento de los horarios (si entrenamos a las 9 hs. es la las 9 y no a la 9 para las 9.30 hs.), la disciplina, la importancia del trabajo, la concentración... Al reportaje lo vió Grondona, presidente de la AFA, y Julián Pascual, dirigente de Ferro y tesorero de Don Julio. Se comunicó por teléfono con "Chiche" y le dijo: preguntale si quiere ser el técnico de la selección nacional. No podía salir de su asombro. Me llamó y me contó con detalles la charla. Hizo lo mismo con Adrián Paenza. Niembro se comunicó con Bilardo, por entonces DT de Estudiantes, concentrado en el country de City Bell, y quedamos en encontrarnos en la Munich de Constitución. Llegamos Fernando, Adrían y yo. Fue al mediodía. Carlos ya estaba sentado comiendo pollo a la parrila y tomando una Crush con cerveza. No entendía nada. En aquel momento, fines de 1982 , él era el máximo representante del antifútbol. A nosotros nos deleitaba con Trobbiani, Sabella, Ponce y Cia. Las últimas 10 fechas le llevaba permanentemente 1 punto a Independiente. Uno y otro ganaban siempre. La última fecha jugaron los dos y fueron visitantes en la provincia de Córdoba y el "Pincha" dió la vuelta olímpica. En el pasado el Gran Osvaldo Zubeldía le había ganado a los grandes saliendo campeón y, ante la impotencia de la mayoría, empezaron a denostar a los que creíamos que además de las habilidades del jugador era necesario un conocimienton superador en la preparación de los equipos de fútbol.

Volvíamos del fracaso del mundial de España. Salimos en el puesto número once. Todavía recuerdo a Olguín y Galván levantando la mano y pidiendo clemencia.
Antes de comenzar y con el conocimiento de la noticia de que Bilardo iba a ser el técnico, ya lo fusilaban sin juicio previo. La sección deportiva del diario Clarín fue la abanderada. La revista El Gráfico no se quedó atrás. Son sólo algunos ejemplos de la ignorancia imperante por aquellos días y que en algunos casos continúa en estos tiempos.
El Dr. Carlos Salvador Bilardo produjo la última revolución táctica. Fue en el siglo pasado y fue reconocido mundialmente. Aún nadie ha podido superarlo.
Recuerdo cómo en el predio de la AFA en Ezeiza durante un entrenamiento, le gritaba a Olarticoechea: ¡subí, subí! El vazco no entendía lo que significaba ser lateral mediocampista. No quería jugar de marcador de punta y Bilardo durante un año le explicaba que su función era otra. El enviado especial del matutino de mayor venta en La Argentina comentó risueñamente que Giusti jugaba de marcador de punta. Fue en un partido amistoso en Europa e hizo el comentario al ver el número 4 en su camiseta. Después de más de 22 años continúa la ineptitud periodística en la mayoría de mis colegas sobre táctica y ni que hablar de estrategia . La renombrada revista El Grafico, con gran respeto en casi todo el país y gran parte del continente, publicó una nota con los jugadores Castro y Ereros, en aquel momento punteros de Argentinos Juniors. Destruyeron, desde el desconocimieto a Bilardo. El análisis del técnico del seleccionado era muy simple: si en el mundo se juega con dos delanteros, ¿para qué quiero punteros? Ya fueron. Esa función la tienen que cumplir otros hombres. Si los contrarios tiene dos de punta, ¿para qué quiero cuatro en el fondo? Pongo uno libre y dos que marquen a los dos adversarios que juegan adelante. Hoy parece todo fácil. En este siglo, los técnicos cuando van perdiendo un partido sacan a uno de los cuatro del fondo y ponen un semidelantero.
Puedo seguir en esta línea de análisis pero es remover sin mucho sentido.

Recuerdo una cena en el ahora turístico San Telmo. Era el cumpleaños de Humberto Grondona.
Participábamos entre otros Don Julio, sentado al lado de Bilardo, Niembro, Pellegrino amigo de la esquina de Serrano y Loyola en el barrio de Villa Crespo en mi adolescencia, junto a Humbertido, Miguel Fernández y Marcelo Benedetto, entre otros. El vino era más que barato. Sinonimo de bastante malo. La comida en "La Raya" aceptable. En un momento le dije a Grondona: ¿qué esperás para nombrarlo a Bilardo el Zagalo de La Argentina? Mario era el mayor ganador en la historia del fútbol brasilero. Parreira era el técnico y el "lobo" manager. El silencio fue la única respuesta que pudo encontrar Grondona.

Pasaron casi 19 años. Los fracasos nos acompañaron en los mundiales de Estados Unidos, Francia, Corea-Japón y Alemania. Ganar o perder descansan en un trípode (esto lo aprendí en la conferencia de prensa que dió Bilardo luego del triunfo frente a Corea en el mundial de México): dirigentes, jugadores y cuerpo técnico. Cada uno le pondrá a estos fracasos el porcentaje de responsabilidad que crea conveniente.

Ahora, después de la renuncia de Alfio Basile, reaparece Bilardo. Quiero decirles que soy parcial en mi opinión por el gran respeto, afecto y admiración que siento por Carlos Salvador.
Creo, por todo lo que han leído, que tengo autoridad para pedirle al cuerpo técnico, una nueva revolución. Este equipo debe ser diferente en lo táctico y profundizar en lo estratégico. Tienen que volver a sorprender al mundo futbolístico como en el 86. Con todo respeto. Estaba Maradona. En el 82 también. No quiero que nuestro seleccionado con Messi y Cia. juegue como en el siglo pasado.

Puedo decirte querido Carlos que no me alcanzan los recuerdos. Vivo con ellos. Aprendí con ellos. Sigo gozando con ellos. Crecí con ellos. A 17 años José María Muñoz me mandó a casi 60 km. de la capital para cubrir por radio Rivadavia a Estudiante de La Plata en el predio que había comprado el entonces presidente Mariano Mangano. Mis compañeros preferían ir a la concentración de Racing que estaba en un hotel a diez minutos de nuestros estudios. Quiero decirles a mis queridos colegas de la radio que les estaré eternamente agradecido. Su comodidad me hizo aprender, conocer, entender y educarme junto a Osvaldo Zubeldía y todo su equipo. Salimos campeones. Lo repetimos en varias oportunidades con Eduardo Manera y Carlos Bilardo. Eso ya es historia. Como lo fueron los mundiales de México e Italia.

Ahora, mi querido Doctor, ya fuiste.
Espero una nueva revolución.
Necesitamos de vos.
Inventá, creá, innová como lo hiciste con Diego en el 86.

Si lo veo por estos lugares a Milos Forman le rogaría que haga una película sobre fútbol.
Vos fuiste Amadeus. Los demás siguen siendo Salieri.

martes, 20 de enero de 2009

YANKEES GO HOME!


Estoy en los Estados Unidos de Norteamérica. Hoy es el día en que asume Barack Hussein Obama como Presidente. Los republicanos no quieren ni verlo ni oirlo. Los demócratas vuelven después de ocho años. Creen que con él todo volverá a la normalidad. Mientras tanto voy descubriendo, ante mi asombro, nuevos productos y precios que pretenden dar un mayor comfort a la mayoría de sus habitantes. Delante mío, en el supermercado Costco, un señor abona, con tarjeta de crédito, por supuesto, u$s 399.99 por un televisor LCD de 32 pulgadas. Mi yerno Germán, que está haciendo el doctorado en economía, me pregunta si conozco las nuevas bolsas de residuos para el hogar que son perfumadas… Por un instante pensé que yo era más ingenuo de lo que la mayoría supone de mí. Pero era verdad. Ayer fue feriado nacional. Golpean la puerta. Es el cartero que traía un paquete para mi hija Luciana. Firmo el recibido. Trabajan igual que casi todo el comercio. Revelar fotos de 4x6 sale 0,12 centavos de dólar, casi 0,42 centavos de los nuestros. Claro, dirá alguno, los insumos son de ellos. Por supuesto, los que se usan en los campos argentinos también. Basta de consumo.

El primero de febrero se juega la final de fútbol americano. Baltimore y Pittsburgh se van a enfrentar en Tampa Bay, Florida.

Gracias a la colaboración del Dr. Adrián Paenza empecé a desasnarme sobre las particularidades de los deportes que se juegan en esta parte del continente.
A propósito de la final del fútbol americano repasemos algunas situaciones interesantes. Están comunicados por micrófonos y auriaculares el “quarterback” y un jugador más de campo recibiendo indicaciones del entrenador de la jugada que quieren que se haga en determinado momento del encuentro. Además en una de sus manos estos jugadores tienen una minicomputadora donde pueden ver el formato de la jugada.
Cada entrenador puede “desafiar” las determinaciones de los árbitros en la cancha, dos veces por partido. Si tiene razón se cambia la sanción y si no la tiene, pierde un tiempo muerto de los asignados. Además hay un grupo de referees que está en la parte alta del estadio y puede reveer una decisión de los que dirigen en la cancha.
En el hockey, hay cámaras encima del arco como para tener una vision aérea, y poder determinar si la pelota pasó o no la línea.
En el basketball, al finalizar cada período, los árbitros pueden recurrir a la televisión para poder determinar si un tiro fue válido o no. También pueden utilizar los monitores en cualquier momento para saber si un foul fue hecho fuera de la zona de tres puntos o dentro de ella. Si la infracción fue afuera tiene tres tiros libres y si fue adentro tiene dos. Todos los partidos de la NBA son grabados en DVD, y en el momento que termina el partido, los árbitros están obligados a volver a verlo y explicar cada una de las decisiones que tomaron en la cancha. Los árbitros son tres y no se conocen hasta una hora antes de cada partido. Ni siquiera los equipos involucrados en el encuentro lo saben. Llegan los tres a una ciudad sin que los participantes del juego puedan saber quienes son. Se enteran una hora antes del partido. Esto no impide la inmoralidad descubierta en varias oportunidades.

Mientra tanto, en nuestro bendito fútbol, La International Football Board, encargarda de las modificaciones reglamentarias, dominada por los escoceces, galeses, irlandeses…continúan con su conservadorismo. En el último año sólo realizó una modificación. La semana que viene se reunirán en Irlanda del Norte por cinco días. No hace mucho y con gran esfuerzo autorizaron a los pobres directores técnicos a dar un par de indicaciones a los gritos desde en un corralito. Algunos dirán que son países distintos, culturas diferentes, deportes que poco tienen que ver con lo que a los argentinos nos apasiona. Seguimos discutiendo si las tácticas sirven o no. “Lo único que importa son los jugadores” dicen algunos técnicos mediocres de arriba y cobran premio doble por ganar. Por supuesto, para los jugadores el premio es simple.

Llega la final de fútbol americano. Las entradas se revenderán en miles de dólares.
Se agotarán los televisores de LCD para ver el partido del domingo.
El lunes, como marca una ley del consumidor en este país, podrán devolverlo sin dar mayores explicaciones. Para algunos productos tienen hasta treinta días para poder hacerlo. De inmediato y sin preguntas les reintegran el dinero pagado. Sí, ¡ustedes también se dieron cuenta! ¡Están aprendieron algo de nosotros!

sábado, 17 de enero de 2009

SIGLO XXI: EL QUE NO AFANA ES UN GIL


Racing estaba quebrado. Había que salvarlo. No era un Temperley cualquiera. Los políticos hinchas comenzaron a moverse. Era como rescatar a La Argentina de la quiebra. Los habitantes de la Casa Rosada, ministros, diputados, gobernadores, economistas, influyentes ….pido disculpas por aplicar el plural ya que Racing, según la única encuesta seria, realizada por la Consultora Equis cuyo titular es Artemio López, disputa el quinto lugar en popularidad a nivel nacional junto a San Lorenzo con menos del 5% de simpatizantes cada uno y lejos del primero que es Boca, el segundo River y el tercero Independiente. La irresponsabilidad casi generalizada de los dirigentes que manejan las asociaciones civiles sin fines de lucro pero con fines de pérdida, como los clubes de fútbol, y sumergidos en un descontrol administrativo hacen que el manejo del dinero ajeno sea distinto a lo que realizan en sus actividades particulares, si es que la tienen. Les importa muy poco el amor a la camiseta, y que algunos cumplan funciones sociales de un Estado ausente. Lo pregonan simplemente por un acto emocional demagógico y populista. No son responsables por las constantes pérdidas económicas. Si el dinero no es de ellos… qué les importa. No hay ningún tipo de control, y por supuesto no está contemplado ningún castigo. Esto dicho sin ingresar, como lo conversé con varios dirigentes, en el terreno de la inmoralidad. En algunos reportajes que realicé por televisión, en el “canal público”, entre otros a Raúl Gámez y Carlos Heller los finalizaba agradeciéndoles su presencia y manifestándoles que eran dirigentes decentes. Quiero contarles que recibía llamados telefónicos de otros directivos preguntándome por qué los trataba de esa manera y si yo me creía que ellos eran distintos. Mi respuesta era siempre la misma: SÍ.

Muchos argentinos sufren, de a ratos y por conveniencia, de una enfermedad descubierta por los psiquiatras alemanes Emil Kraepelin y Alois Alzheimer hace más de un siglo y los afecta para recordar el parejo (casi todo mal) gobierno de la Alianza. Menemistas, Duhaldistas, Alfonsinistas, Progresistas se unieron, como no lo hacen por el país, para que la gloriosa Academia siga en primera división. Sólo algunos nombres académicos, Carlos Federico Ruckauf, el entonces Gobernador de la Provincia de Buenos Aires, y Carlos Alberto “Chacho” Álvarez, el entonces Vicepresidente de la República, fueron fervientes colaboradores racinguistas. La ley de fideicomiso se aprobó en tiempo récord y comenzó en La Argentina el gerenciamiento manejado por el publicista y empresario Fernando Marín. El formato jurídico no era la de una sociedad anónima. 

Muchos clubes en el mundo son sociedades anónimas constituidas por los nuevos ricos, con dinero proveniente, según se comenta en Europa, del lavado de dinero. Hay algunas ligas como la española  donde conviven distintos tipos de sociedades. Está claro lo que ocurre en La Argentina con las asociaciones civiles y con los gerenciamientos. En Racing cuando se vendía algún jugador el 20% de esa transferencia le correspondía al club. Cuentan algunos allegados a los distintos gerenciamientos, que se hacían sociedades en el exterior que compraban algún jugador por una cifra simulada para que lo que recibiera el club sea lo menos posible. Luego la sociedad hacía la reventa a una institución, siempre del exterior, en un importe llegaba en algunos casos a quintuplicar el valor del jugador. Por supuesto que se encargaban de pagar las deudas, en cuotas, que habían dejado los ex directivos que llevaron a la quiebra a la institución  de Avellaneda. Hay ejemplos de sociedades civiles, cuyos dirigentes, actuaron de la misma manera, utilizando la complicidad de representantes, intermediarios o empresarios de la compra-venta de futbolistas, que actualmente están participando en las ligas de Italia, España, Inglaterra…

Daniel Passarella quiere ser presidente de River. En el lanzamiento de su candidatura y ante “caracterizados” politiqueros y socios del club, dijo en su discurso entre otras cosas: ¡SI GANO SE TERMINA LA JODA! Esta frase merece algunas reflexiones querido Daniel….Si vas a terminar con LA JODA significa que sabés que hubo y hay JODA. ¿Por qué no la denunciaste durante los últimos años que dirigiste a River? En la cena donde resonó tu revolucionaria frase estabas acompañado por gente que está muy cerca a la conducción que denunciás y por lo que dijiste se supone que habrían participado en las JODAS. No me da la impresión, estimado Daniel Alberto, que haya sido una denuncia. Más bien un discurso al que estamos acostumbrados los argentinos cada vez que escuchamos a algún político que quiere llegar al poder. ¡Como siempre con o sin Passarella LA JODA SEGUIRÁ!
 
Podemos disentir, discrepar, opinar y pensar distinto. ¿Por qué no nos movilizamos mentalmente y nos ponemos con sinceridad a discutir? No nos creamos los dueños de la verdad. Dejemos de creernos omnipotentes. Hacerlo es enriquecedor. Por supuesto desde la decencia y la honradez. Si ya sé, estamos en minoría. Me duele. Lo siento. Perdimos.

lunes, 12 de enero de 2009

LA DERROTA DE LOS IDOLOS

La mayoría sabe que los socios de los clubes de fútbol quieren acceder al poder por distintas razones.

Algunos están al día con su cuota y no siempre son simpatizantes del club que marca su carnet. La ambición, no sólo pasa por ser presidente, vice, secretario o vocal, es también utilizar ese mecanismo para estar lo más cerca posible del ámbito económico financiero de la institución. Varios llegaron pobres y se fueron ricos. Otros llegaron ricos y se fueron más ricos aún...Los menos se fueron como vinieron o peor. No son muchos los que uno podría calificar como decentes y honrados. Lentamente fueron imitando la miseria diaria en la estamos sumergidos los argentinos. Entre los militares, políticos, gremialistas y los que Vd. agregaría, todos ellos fueron construyendo el país que tenemos.

Generalmente es muy baja la concurrencia al acto eleccionario en casi todas las instituciones. En nuestro fútbol es muy común, ante la mala actuación de los equipos, el buscar rápidamente algún ex jugador del club para que se haga cargo de la dirección técnica, como si eso fuera sinónimo de capacidad y conocimiento.

Algunos han puesto de moda, en las campañas proselitistas, el estar acompañados por ídolos que fueron tejiendo gran parte de la fructífera historia futbolística de las instituciones.

En las ultimas elecciones de River el ex presidente David Pintado entendió que con la presencia a su lado de Ramón Díaz, ídolo de la barra brava y según muchos socios y simpatizantes el único que podía ser el director técnico del equipo, ante los constantes fracasos deportivos era el que mejor representaba la voluntad popular de los hinchas riverplatenses. El propio Ramón, que decían que había ganado todo (se olvidaron que nunca obtuvo la Copa Intercontinental) con su sola presencia garantizaría el triunfo del Dr. Pintado, salió tercero detrás del oficialista José María Aguilar y de Alfredo Davice.

Hace poco otro tanto ocurrió en Independiente. Las acusaciones de la oposición, a través del máximo ídolo Ricardo Bochini (empleado rentado del club por Comparada que además en nombre de la comisión directiva le obsequió un palco en el nuevo estadio) asociado en esta oportunidad con Daniel Bertoni, recorrieron los canales de televisión, estaciones de radios, diarios y revistas para denostar al propio Julio Comparada. Las acusaciones pasaban mencionando a viva voz que el nuevo estadio no estaba terminado pese al ingreso millonario por las ventas de Agüero, Ustari, Denis y compañía, que las actuaciones del equipo eran desastrosas, que no se ganaba nada, que se compraban jugadores que no tenían nivel para jugar en Independiente, que financieramente estaban con deudas millonarias....El discurso y la promesa electoral era hacer un equipo competitivo y volver a dar las recordadas e históricas vueltas olímpicas. El resultado: ¡Perdieron por goleada!

¿Llegará alguna vez el día en que los dirigentes piensen en la capacidad y honorabilidad de la gente que los tiene que rodear o seguirán imitando a los que, como los que nos gobernaron antes y ahora, sigan compitiendo quien se lleva más, lo esconde mejor y dejan al anterior como si fuese un carterista?

Siempre me pregunto: ¿Tendremos solución? ¿Usted que piensa?